domingo, 20 de julio de 2008

Domingo frío

Claro que hay cosas que no me gustan. Y os echo mucho de menos. Y hay momentos que pienso que qué coño hago aquí. Y me entra vértigo cuando soy consciente de lo lejos que estoy. Y tengo miedo. Y no estáis. Pero no os voy a contar esas cosas aquí. Además procuro no pensarlo y que esos momentos pasen rápido.
Mejor os cuento lo chulo. Anoche estuvimos en La Boca, en un garito muy auténtico escuchando a una banda de rock and roll y bebiendo Quilmes negra. Creo que ha sido uno de los mejores momentos. Por supuesto fuimos en taxi hasta la puerta y llamamos a uno para volver que nos recogió en la puerta. En La Boca no se puede estar por la noche. Tengo que volver de día para verlo todo pero con el ritmo de las clases es un poco complicado. De camino paseamos por San Telmo que tiene mucha actividad por la noche y comimos pizza. Esta mañana he ido (yo sola, ya soy mayor) al parque de Rivadavia. Es cerca de la casa, estamos en el barrio Caballito, para que os situéis. Había feria y coches antiguos, había unos de bomberos muy bonitos, ya os pondré las fotos. No es que tenga debilidad por los coches de bomberos (que aunque esté lejos os leo el pensamiento). Había mucha actividad cultural porque lo organizaba la red del barrio. Aquí funciona muy bien el movimiento vecinal. Como los barrios son tan grandes actúan como pequeñas ciudades. En ese parque hay todos los días una especie de feria del libro. Venden de todo. Es impresionante, hay cómics antiguos, discos de vinilo, revistas, libros... Aún no he encontrado ningún llibret pero seguiré buscando. El que quiera algo es momento de encargarlo porque además el precio vale la pena, los cómics valen entre 2 y 4 pesos (un euro son 4'78 pesos) y los vinílos hasta 5 pesos. El parque tiene una enorme estatua de Simón Bolivar a caballo pero sin placa, las placas de bronce de Buenos Aires desaparecieron todas "cuando la crisis".
Por la tarde hemos ido a grabar las placas de la plaza de Almagro. Hace mucho frío, el invierno ha llegado de golpe aunque dicen que aún habrá más cambios. Estamos todos medio constipados porque no sabes el día que va a hacer, de 28º se pasa a 5º con una facilidad pasmosa.
Esta noche he ido al cine, he visto una película que hizo en el máster de documental de la Pompeu Fabra una chica de aquí. Se títula "Diario argentino" y es curiosa. Es curiosa vista desde aquí, cuenta la historia de esta chica que está viviendo en Barcelona desde 2002 y que vuelve para averiguar por qué tiene dislesxia, confunde la izquierda y la derecha. A través de sus conversaciones con su madre y el marido de esta cuenta la historia de Argentina desde la vuelta de Perón y vas adivinando por qué confunde la izquierda y la derecha. Me ha gustado porque es lo que nos estamos preguntando desde que estamos investigando sobre el tema de las placas. Aquí no hay izquierda y derecha, están mezclados, en cada partido están las dos facciones. Para un europeo es un lío. La única distinción que se hace es entre radicales y todos los demás, radicales de lo que sea.
He visto que Les Luthiers van a estar por aquí, la putada es que a Buenos Aires no vienen hasta el 5 de septiembre, que ya estaré allá. Pero en agosto están en Rosario (la ciudad con nombre de madre) y estoy pensando que voy a ir. Está a 300 kilómetros y en bus se viaja bien. No me quiero perder la experiencia de ver a Les Luthiers en Argentina (qué grande) y más cuando por aquí se dice que puede que sea de las últimas actuaciones que hacen.
Cosas curiosas: Ximo, te encantaría tomar café aquí, siempre te ponen dos sobre de azúcar y dos de edulcorante (así llaman a la sacarina de toda la vida) y un vasito de agua con gas. A los croasants los llaman mediaslunas y a los pastelitos pequeños facturas. Imaganina llegar a un bar y que te digan ¿quieres facturas? de qué? de agua? de luz?. A las fresas las llaman frutillas. Te dicen "tenemos frutillas" y tú dices "qué frutillas?" y se descojonan, o se parten el orto.
Tengo un montón de fotos para poner pero este ordenador (el de Isidro) no me deja. Así que a esperar que Sara no lo esté usando y yo tenga tiempo de subirlas. Besos mil.

1 comentario:

Ángeles dijo...

¿Cómo que echas de menos a la gente? ¡Ni se te ocurra! Si sólo te queda mes y medio para volver, ¡aprovecha!

Lo de la intimidad con la gente en casa tiene mal arreglo, pero siempre te puedes coger una noche de hotel para estar a solas, que de vez en cuando viene bien (aunque yo, por supuesto, te recomiendo que te vayas bien acompañada, que sienta aún mejor).

Veo que nadie te cuenta de la boda. Pues la verdad es que estuvo muy bien y eché de menos la cámara de fotos, aunque sólo hubiera sido por fotografiar al pope, cura o como se llame el señor con ojos de zumbado que ofició la ceremonia.

Fuimos de los primeros en llegar a la iglesia, y nada más vernos salió a preguntar por los novios diciendo que él tenía unos anillos bendecidos y que no se iban a quedar sin uso. El tío estaba decidido a casar a alguien esa tarde, fueran los novios o no. Como Mar y Paco ya están casados, en nuestro grupo sólo nos quedaba una opción: que casara a Ximo con Juan Carlos. Al final llegaron los Ela y Pablo y nuestros chicos siguen en pecado.

La ceremonia larguísima, sobre todo porque tienes que estar de pie todo el rato,ni siquiera hay sillas. Pero hay que decir que, a diferencia de los nuestros, el cura parecía convencido de lo que decía. Claro, que como era en ruso a saber qué estaba diciendo exactamente. A mí me dió un escalofrío cuando en la parte en castellano bendijo a los ejércitos españoles...

La novia, guapísima, desde luego. Pero no tiene mérito porque para que Ela esté fea habría que ponerle una bolsa en la cabeza o algo así. Pablo muy digno, incluso cuando le quiso quitar la corona al pope para ponérsela el solito (¿a quién te recuerda eso? jejeje). Ah, nosotros también estábamos muy, muy guapos; de hecho, nos quedamos las fotos que nos hicieron durante la cena. Si JC se acuerda de escanearlas te las envío.

Hubo representación del folcklore ruso (la parte melancólica y tristona, nada de danza de sable, cosacos y vasos de vodka por los aires), maño (un grupo de jotas muy gracioso) y, por supuesto, del nuestro: Ximo y Mar salieron a cantar e hicieron que se levantara todo el mundo a bailar. La gente tenía ganas de fiesta y fue divertido.

Hale, hasta aquí mi resumen, ya te contarán los otros su versión.

Besets.