Equipo

Hoy se ha ido Isidro, el malagueño de Ceuta. Con el documental hemos pasado mucho tiempo juntos, nuestro grupo se quedó un poco reducido. Me ha encantado trabajar con él, desde el principio hicimos un buen equipo y nos entendimos a la perfección. Tiene un gran sentido del humor y nos hemos echado muchas risas juntos. Está lleno de proyectos y con su carácter disciplinado y "prolijo" seguro que todos le salen bien. Es de estas personas que me gustaría volver a encontrar en la vida. Estoy segura de que dentro de un tiempo, cuando sea famoso, escucharé por la televisión con acento manchego eso de: "Hola, soy Isidro S. Guerrero. Director de cine". Y, como dicen acá, me cagaré de la risa. Mucha suerte.

La Jachi es una perra colifata

Lo dijo Trinity. Les conté las cosas que hacía, como lo de esconderse cuando llama un desconocido y ladrar cuando es conocido. La conclusión fue clara, la Jachi es una perra colifata.

Hugo, el famoso Hugo. Tenéis que probar sus platos, dignos de los mejores restaurantes. El sábado nos reímos porque se le olvidó en su programa hacer la comida. Dijo que como venía de comer con unos amigos y traía el estómago lleno no se acordó de los demás. "Yo que siempre hablo de compartir y de la solidaridad". Con Beat, Trinity y Julio camino del Subte. Fuimos todo el camino haciéndonos fotos y vídeos. El cámara era Jagger. En el subte nos echamos unas risas porque Trinity quería comérse la planta de Beat. Jagger trata de impedirlo. La despedida tenía que ser haciendo algo divertido. Menuda pandilla. Teníamos las flores, los padrinos, la noche era hermosa.... así que nos casamos. Ximo, ya se que te prometí no hacerlo pero la proposición era tentadora y me aseguró que es de buena familia. Mirad que serio y circunspecto está el novio. Me prometió fidelidad pero le obligué a ponerse un cinturón de castidad mientras dure la separación.
Cómo los voy a extrañar!!

Maletas

Ya estoy haciendo la maleta. Como era de esperar no cabe todo lo que traje más lo que llevo. Libros, mates, remeras, alfajores... Han sido dos meses intensos en los que he conocido esta ciudad, en la medida en que se deja conocer.

Mira Manolito, he encontrado la estatua. Ahí está con su lanza y todo. Es una escultura de bronce sobre un monolito inmenso en la Plazoleta del Cid Campeador, cerca de la casa donde vivo.

Sara dulce, cuéntame

Hoy nos hemos despedido de Sarita, la italiana. Es una de las mejores cosas que han pasado, conocerla. Sara es dulce, pequeña, parece un personaje de cuento, con sus pequitas. Sin embargo es una mujer inteligente y culta con las cosas muy claras. Desborda arte y creatividad. A pesar de que su cabeza va a mil por hora habla muy pausada, meditando cada palabra y haciendo un gesto muy simpático con la mano. Un día en clase estaba hablando así y la profesora le dijo que si tenía dificultad para el castellano que hablara en italiano, Sara contestó que no, que en italiano hablaba igual. Y es cierto, cuando estaba Luca con él hablaba igual de despacio. Si un día vais por Sicilia y os encontráis con un personaje con un gorrito rojo caminando a saltitos, como por el sendero de baldosas amarillas, y sonriendo a todo el mundo, es Sara, le dáis recuerdos de mi parte.

Mi tornillo se quedó en La Colifata

Creo que nunca he tenido una despedida tan triste. Dejar el jardín fue, como dijo Fontán, como ser expulsada del paraíso. Tanto cariño en tan poco espacio. La labor que hacen es impresionante, en el tiempo que he estado lo he podido comprobar, Julito, por ejemplo, el peruano. Era un terremoto y ayer se hizo el milagro. Comenzó a hablar de su tierra, de lo que hacia de pequeño, contó sus historias y quedaron para el sábado que viene intercambiar historias con él. Pero es mucho más. Lo que me ha cautivado han sido las personas, los que hacen cada sábado la emisión. He encontrado amigos, gente que te abre el corazón, el primer día decía que te hacen tragárte tus prejuicios en cuanto ves que ellos no los tienen. Los prejuicios son perjudiciales para la salud, como dijo Quintana. Me daban las gracias cuando soy yo la que tengo que estar agradecida. Me llevo mucho más de lo que les he podido dejar. Pero ante todo les agradezco que me hayan hecho amar más la radio.

Me llevo lo que no tengo, lo que a ellos les sobra. Me llevo la determinación de Miguel para resolver sus problemas, el humor de Hugo y su capacidad para disfrutar de los manjares virtuales, me llevo la valentía de Jagger para decir que no puede enfrentarse a la vida solo, la cultura de Álex y sus análisis, el mundo maravilloso de Ever en el que me perderé de vez en cuando, el cariño de Mario y sus armas para luchar contra la depresión, el corazón de Julio y su capacidad de escuchar, la creatividad de Plumita, la disciplina de Fefo y sus reflexiones, la agilidad mental de Trinity y su facilidad para reirse de todo, la sensibilidad extrema de mi Beat... y la fe férrea en lo que hacen de Alfredo, Laura, Débroa, Sila, Verónica y Laura. Estas herramientas que robé me van a servir en vida.

Me gustan los símbolos, dicen mucho en poco espacio. Por eso llevé mi tornillo, allí se quedó, sobre la mesa emisora de La Colifata. En el Jadín del Borda, el mismo sitio en el que me hicieron quitármelo.

Lo que echaré de menos

Hoy he ido de compras. No había podido ir desde que llegué. Hay tiendas en las que los diseñadores se unen, alquilan un local y venden todos juntos. Otras zonas que están llenas de oulets, otras de tiendas de marcas intocables para la gente de aquí. Poco a poco me voy despiediendo de todo. Esta ciudad está sucia, nada funciona como debería, los argentinos no dejan de preguntar, primero era por qué el barça no dejaba a Messi ir con la selección, luego lo de Marsans y ahora por lo del Banco de España. Parece que Cristina ya no es muy amiga de los españoles y se está anotando, no te dejan fumar en ningún sitio, todo lo suyo es lo mejor del mundo.... sin embargo aquí puedes ir al teatro o al cine todas las noches, las librerías de Corrientes están abiertas hasta las once de la noche, hay cafés literarios, te venden poesías en el metro, los parques tienen ferias del libro todos los días, hay cien mil variedades de chocolates y golosinas, la carne es impresionante, todo el mundo quiere ayudar, el tango, la milonga, el vals, está la Colifata... creo que Buenos Aires me ha contagiado su espíritu contradictorio.Noche de despedidas, empezamos ya, este es Ángel un amigo de Fany que ha venido para ir con ella a recorrer el norte del país. Noche de vino y risas.

Anoche fuimos al Notorius a ver a Soledad Villamil (El mismo amor, la misma lluvia) cantando. El repertorio era de canciones típicas, milonga, vals y por supuesto tango. Vale la pena verla, más que escucharla, interpreta cada canción como si fuera una película.

El principio del final

El documental ya está acabado. A la profesora le ha gustado y el grupo ha quedado bastate satisfecho. Se titula Son de Todos, ya os lo enseñaré. El sábado lo proyectaremos delante de los dos grupos que hacen las baldosas y que nos han ayudado en la investigación. Yo no podré estar, porque, obviamente, me voy a la Colifata. Estamos preparando una cena fin de curso para mañana en un mexicanos. Comienzan las despedidas. Es un poco triste, además hoy ha empezado a llover y dicen que estará así toda la semana con lo que el final se hace aún más difícil. Han sido, y siguen siendo, muchas cosas. Va a ser muy raro volver a las costumbres, seguro que subiré y bajaré del autobus en marcha o diré "no, por favor, no es nada" cada vez que me den las gracias, seguiré evitando la palabra coger y tendré que pasar el duro mono del chocolate. Pero seguiré bebiendo mate, eso si. Lo de Ibiza me va a venir muy bien aunque pareceré un punto blanco en medio de la gente morena. Hará que el shock sea más llevadero. Tengo una lista de las cosas que tengo que ver, comprar y hacer en los días que me quedan así que mañana os cuento más cosas.

No os puedo dejar solos

Leo en la prensa digital: Fórmula 1 en Valencia
Valencia llena su circuito, aunque no logra subirse aún al carro del 'glamour' de la F-1
Un total de 212.124 espectadores visitan el Valencia Street Circuit durante todo el fin de semana

¿Qué pasa? ¿Qué tengo que estar yo para darle glamour a lo de los cochecitos?. Decidle a Briatore que vuelvo el día 3. Las calles de Buenos Aires sí que son un circuito urbano, pero a todas horas. Este fin de semana he ido a Mar del Plata, ha hecho unos días de sol de invierno muy buenos. El sábado Enrique hizo asado argentino, espectacular, ya os pondré las fotos y el domingo Lorena hizo una paella. Leandro está bastante más grande que la última vez que estuve y me ha dado mucha pena despedirme de ellos. Anoche vino Marisol y estuvimos las tres viendo las fotos de cuando nos conocimos y haciéndonos más para comprobar que no pasa el tiempo. Hace ocho años. La verdad es que las quiero un montón y espero que todo les vaya muy bien. La buena gente se merece cosas buenas y Lorena y Marisol lo son. Espero que todo mejore y en breve puedan "juntar la plata" para el pasaje a Valencia. Leandro ya me ha prometido que en cuanto pueda se viene. Primero tiene que aprender a andar y hablar pero en cuanto tenga esas pequeñas cosas resueltas vendrá a veranear con su tía.

Estoy en la recta final de este viaje, apenas quedan diez días para estar de nuevo ahí y pasar calor. Tengo que aprovechar que quedan cosas por hacer.

Un pedazo de Valencia en Montevideo

La Asociación de la Comunidad Valenciana en Montevideo, una buena experiencia. Gente que se reúne para mantener las tradiciones de la tierra de la que tuvieron que salir. Los domingos suelen hacer paellas.

Los ingredientes, de primera calidad. Esta vez no le pusieron langostinos aunque el caldo lo hicieron con marisco y pescado.

El local de la asociación, son unos trescientos socios. A las paellas se apunta mucha gente que no son socios. Tienen muy buena fama. Este local lo compraron hace unos tres meses, tiene un altillo, dos salas y un patio.

Mariano, el maestro paellero. La paella la hicieron en una forja de Montevideo bajo las indicaciones de los de la asociación. Hicieron otra un poco más pequeña que habían traido de Valencia.

La paella acabada, os juro que estaba muy buena. Debajo había arroz y todo. Lo verde oscuro de por arriba es perejil. Hay guisantes, ajo, pimiento, calamares, costillas, pollo, judias verdes, y no me acuerdo cuantas cosas más. Deliciosa.

Como manda la tradición tras hacer la paella la cubrieron con periódicos y mirad quienes custodiaban el preciado manjar. Más valenciano imposible.

La rifa tras la comida, ambiente casalero auténtico. Como era el aniversario había tarta y todo. 18 añitos. La mayoría de edad. Los que están de pie son la junta directiva. Gente muy maja. Las juntas son los lunes.

Los premios de la rifa, limonchelo. Pero mirad la etiqueta, la había hecho una chica de la asociación. Os suena?

La foto que queriáis, estoy con la Senyera y la bandera de Uruguay. No me la podía llevar ni voy de rojo pero bueno...
No se si alguna vez les habrá pasado a ustedes.... estoy a la izquierda del roble (también podría llamarlo almendro o aracaura gracias a mis lagunas sobre Pan y Linneo).

Esto es en Buenos Aires, cerca de la salida del Buquebus. Si, es de él. Cruza el río de la Plata. Se llama el puente de la Mujer. Me hice la foto porque la alternativa era ponerme en un lado y decirle a todo el mundo: lo ha hecho un paisano mío!!

Paella uruguaya

El domingo me fui a Montevideo. Hay un Buquebus que en tres horas te deja en la capital de Uruguay. Que por cierto, cuando fui a por los billetes me encontré en el subte con Natalie Seseña (Airbag, El día de la bestia) hablé con ella, encontrarte un español aquí da alegría. Es muy maja, me contó que está de vacaciones, que había ido al Konex y que le encantaría trabajar aquí. La dejé en la Plaza de Mayo. A lo que iba, Montevideo es una ciudad vieja, que no antigua y está muy deteriorada. El centro valenciano está cerca de la avenida 18 de julio que es la más importante, la fecha no tiene nada que ver con la de allá. Los valenciano tienen una sede muy nueva y el domigo cumplían 18 años. Cuando llegué me recibieron muy bien y muchos me hablaban en valenciano, la mayoría son muy mayores aunque me dijeron que son unos trescientos socios. El local está presidido por la bandera de España, la de Uruguay, la Senyera y por la Geperudeta que sacan el tercer domingo de mayo en procesión. Detrás tienen un patio donde cocinan las paellas todos los meses, tienen muy buena fama en la capital y van muchos españoles de otras asociaciones. Me contaron que tienen muy buena relación con los asturianos, había varios, les conté lo de Lázaro de la Peña y les hizo ilusión. La paella, salgo al patio y veo unos recipientes con ingredientes de lo más variopintos, había un chico de Burriana que estaba de vacaciones visitando a sus familirares que eran asociados y nos reíamos porque mirábamos la paella como si nunca hubieramos visto hacer una, hasta que él dijo "así no". Empezando que la paella para ellos es la mixta, con marisco. Creo que mejor os pongo las fotos y la veis. El resultado: estaba muy bueno, buenísima diría yo. Me la comí la mar de a gusto.

Tras la paella, como una falla que se precie, se procedió al sorteo de la rifa, unas botellas de Limonchelo. La verdad es que fue una fiesta muy agradable. Me contaron un montón de cosas de la falla y es funcionamiento de la asociación.
Cuando acabé tenía poco tiempo así que elegí y me fui al Jardín Botánico, a la izquierda del roble, siguiendo los pasos de Benedetti. Impresionante. Pasé por Millán y Reyes, Arantxa, pero ya no hay tranvías. De vuelta al Buquebus el taxista me iba contando lo que veíamos, la central eléctrica, el edificio de la telefonía móvil... ya os dije que no era antigua si no vieja.
Un viaje relámpago pero muy aprovechado, lo peor fue la vuelta. Un Buquebus con más de doscientos preadolescentes vestidos de rebelde güey. Socorroooo.
Mañana pondré las fotos que ahora se me cuelga, sólo me ha dejado poner esta, es de Buenos Aires. He descubierto quién tiene la culpa del problema argentino, mirad cómo se llama el Presidente del City Bank. Seguro que es familia. Si es que.....

De vuelta a la Colifata

El sábado volví a la Colifata. De nuevo los amigos, la sensación de paz, de estar en un sitio en el que te acogen, la sensación de ser una mínima parte de algo grande. Hacía mucho frío pero el programa comenzó fuera. Por el skype iban entrando llamadas. Una chica de Barcelona preguntaba cómo podía colaborar con la radio. Algunos comenzaron a pedirle que buscara a sus familiares en España, querían saber de sus orígenes y de las poblaciones de sus antepasados. (Tengo trabajo para vosotros cuando vuelva). De repente Alfredo dice que está llamando Julio Fontán desde Valencia. Cómo??? La conexión era un poco mala y se entrecortaba, no pudo hablar pero fue impresionante. Todos diciendo que estaba Julio Fontán y yo diciendo que era amigo mío. Julio, no sabes cómo me sonaba tu nombre en boca de ellos. Era como si estuvieras allí, como si por fin puediera de verdad compartir con vosotros lo que pasa en los jardines del Borda. La coincidencia llamó la atención de todos, unas chicas francesas hablaban de la magia de la Colifata, de las cosas que pueden pasar. Les comenté que Julio Fontán es fotógrafo, que le encanta la Colifata y que es un tipo extraordinario. Gracias Julio.

Tenéis que escuchar a la maestra Ciruela que me da clases, soy Caperucita Roja.

http://lacolifata.openware.biz/index.cgi

En la página también está colgada la sección de Beat, el contador de pequeñas historias, me encanta. El sábado me regaló varias grabaciones suyas y dos textos que me gustaron mucho. Me hizo mucha ilusión, de los regalos más sinceros que he recibido. Cuando el frío nos hizo pasar dentro hubo otra llamada, era Manu Chao. Increíble. Era uno más, como todo el que se acerca, estaba en Barcelona y les contaba cómo iban las cosas. Se intercambia mails con muchos de ellos y todos lo saludaban con un cariño especial. Trinity le felicitó porque tiene un par de cojones para hacer lo que está haciendo, Manu contestó que lo que hay que hacer es juntar dos millones de pares de cojones y que eso es lo difícil. Manu Chao grabó con ellos un CD con textos colifatos y músicas suyas. Les dijo que en breve estaría preparado y que lo llevaría para que ellos lo vieran y dijeran qué estaba bien y qué estaba mal. Era un productor musical hablando con los artistas. Al fin y al cabo es lo que es, no se de qué me sorprendo. Por qué la naturalidad y la falta de doblez llama la atención. Esta gente ha grabado un disco con Manu Chao, ha rodado con Coppola, son conocidos en todo el planeta y ahí están, cada sábado compartiendo sus vivencias y su creatividad. La sección de Beat fue muy rockera y bailamos hasta caer agotados, yo por lo menos. Descubrí a Álex, una de las personas con más cultura que he conocido y con una capacidad impresionate para relacionar datos. Habló sobre la psicodelia y los alucinógenos. Le preocupa la transitoriedad de la existencia. Jagger le felicitó por su programa, Jagger es un joven con muchas ganas de aprender de los demás, se fija mucho en Álex y en Beat. La humildad dicen que es síntoma de inteligencia y este jardín está lleno de ambas.

En la página podréis ver las noticias sobre el posible cierre del hospital, parece que han vendido los terrenos sin buscar alternativa de colocación. Julio me contó lo que había ido saliendo publicado, se lamentaba de la impotencia que sentía ante la situación, "si tuviera plata para comprar 200 ha de terreno me los llevaba, yo he estado ahí ingresado, ahora estoy fuera, pero son mis compañeros". Tremendo.

Experiencia Konex

El miércoles fui a la ciudad cultural Konex. Es un sitio impresionante. Unas antiguas naves de fábricas reconvertidas en centro cultural. Tiene cuatro salas para espectáculos, sala de exposiciones, cafetería, patio zen... Cada noche hay varios espectáculos a la vez. Vi Rent, un musical americano de finales de los 90 basado en La Boheme. Me encantó, muy rockero, y aunque el texto está un poco pasado y algunos actores tan solo cumplían, las canciones son magníficas y la puesta en escena impresionante. Pero lo más llamativo sin duda era el sitio. Una inmensa nave apenas sin tocar, sólo el escenario, unas butacas que parecían recicladas de un teatro antiguo, algo de espuna aislante en el techo y poco más. El jueves volví, vi Finales, una obra de teatro impactante con cuatro personajes y una cucaracha. Los actores eran muy buenos pero de nuevo la experiencia mayor fue el sitio. Era una de las salas pequeñas, sin escenario, las dos primeras filas, con sillas de plástico, estaban en el mismo suelo. Detrás, con pequeñas tarimas se iba formando el resto del patio de butacas. Teníamos a los actores a la misma altura. La obra duró tres horas que pasaron volando y sin hacer perder un minuto de atención. En un momento de la representación cuando los personajes descansan, sirvieron té y pastas al público. No se por qué no hay sitios como el Konex allá.

Estuve en Aerolíneas Argentinas, me ofrecen un vuelo el día 2 con destino Madrid, creo que iré en ese. Pero no voy a las cataratas, los vuelos internos aquí son muy caros para los de fuera. Utilizaré esos últimos días para completar mi visita a la ciudad. Después de tanto tiempo hay cosas que me quedan por ver y hacer. Lo de la maleta de regalos está complicado, el exceso de equipaje no es conveniente. Por mucho que digáis sé que me echáis de menos, al menos tanto como yo.

Buenos Aires, la contradicción

Esta ciudad es pura contradicción. No me refiero a diversidad y contrastes, no, contradicción. Desde que llegué la noto en todas partes. En las personas, en las calles, en las noticias, en el ambiente, en la comida. Empezando por la definición de la "europa de latinoamérica". Aquí convive un enorme complejo de inferioridad con uno de superioridad en perfecta armonía. He conocido a soberbios desgraciados, reaccionarios de izquierdas, rojos de derechas, gays homófobos... adoran todos a un país que se están cargando. Hay un anuncio en la radio que dice "juegue a los juegos públicos (la lotería, las apuestas... todo es del estado), con el dinero que usted juega hacemos hospitales y colegios, cuanto más juegue más contribuye" y acaba diciendo "el juego es peligroso y puede llevar a una grave enfermedad". Caminas por la calle y ves un edificio de estilo francés en el que hay una tienda de informática y al lado un moderno edificio de cristal con una tienda de antiguedades. La casa Rosada es salmón. Tienen con todo una relación amor-odio que a fuerza de verla llegas a encontrarla normal. Aquí todo parece normal, todo natural, hasta que te paras y lo observas detenidamente y piensas que no puede ser. Muchos hablan de la época de la represión como de "la guerra". He visto gente con hijos en España trabajando que se queja de que los uruguayos vienen aquí a buscar trabajo. Es un quilombo, parece que nada tiene sentido. Pero acabas adorándola. Es como esa vecina loca pero entrañable de la que sólo puedes decir "dejalá, es así".

San Telmo

Ayer fui de nuevo a San Telmo. Es un mercado que ponen los domingos lleno de artesanía y antiguedades. Hay de todo. Las tiendas de antiguedades aquí son muy especiales. Parecen rastrillos de casas de la abuela. Dicen que en la crisis del 2001, siempre todo es por la crisis del 2001, la gente vendió todo lo que tenía en sus casas, y ahí está, tal cual. Vitrinas con las cosas que puede haber en cualquier casa. Muebles, utensilios, jarrones, cosas de decoración, pero todo muy normal y todo a la venta. En la calle artesanía, ropa, mates, cosas de cuero, carteles, cuadros... También artistas callejeros y comida. Luego fuimos a grabar la fabricación de las baldosas, los del barrio de Almagro las hacen en la calle. Es como un ritual, el cemento, los moldes, el cálculo de los renglones, acoplar las letras y al almacén a que se sequen. Por la noche estuve en la cafetería Violetas, una de las más famosas, decorada como de principios del siglo pasado con el techo alto y apliques por todas partes. Ya estamos con la edición del documental. Hemos acabado las grabaciones y más o menos tenemos el preguión hecho. De clase sólo queda el seminario de montaje. Serán dos semanas intensas pero tengo ganas de verlo acabado y ver dónde nos ha llevado todo esto. Como viajo en Aerolineas Argentinas y era de esperar, han cancelado mi vuelo de vuelta. Tranquilos. Su solución es adenlantarme al vuelo del 31 de agosto. Ya veremos cómo queda la cosa porque esos días quería ir a Iguazú y al menos ver las cataratas. No pienso quedarme, me encanta esto, es muy bonito, me podría acostumbrar incluso, pero no. Con sus contradicciones, de las que os hablaré, y sus rarezas, estoy empezando a entender esta ciudad. Ahora estoy empezando a estar a gusto. Y siempre tengo La Colifata como refugio.

Que los cumplas feliz Radio La Colifata

Hoy he estado de nuevo en La Colifata. Me ratifico, vine aquí para conocerlos. Este es el verdadero sentido de este viaje. Era el 17 aniversario y han hecho una fiesta de cumpleaños. Hemos cantado "que los cumplas feliz", que es como se canta acá. Entre los cortes de voz del pasado que han puesto había uno en el que Pajarito (quería que hablara de él en el blog, pero eso os lo cuento después), hacía entrevistas preguntando qué opinaban de los “de afuera”. Me he dado cuenta que los “de afuera” son en realidad los “de adentro”. Ellos son los de afuera. Imaginad llegar a un lugar en el que se reúnen unas cincuenta personas que no conoces y te tratan como si fueras uno más, como si te conocieran, no de antes, si no de toda la vida. Así es el jardín del Borda, te acogen, te miman, te integran sin preguntarte nada. Hablan de cualquier tema con naturalidad y sin prejuicios. Hoy toda la programación ha sido fuera y han sacado una tabla con una sábana blanca de pantalla, sobre ella proyectaban páginas y fotos de internet. Siempre buscan información y la semana pasada, que no fui, encontraron mi blog con la entrada que hablaba de ellos y la proyectaron. Me ha hecho mucha ilusión. Me lo ha contado Fefo, que hace el “acuse de recibo” con los mails que llegan a la página, y luego, en la entrevista de “Visitas” lo han abierto y les he enseñado lo que vosotros pusisteis, les ha gustado mucho. Les he hablado de Manolito, que es periodista y fan de Hugo, de Julio y su agradecimiento y del mensaje de mi madre. Pajarito se ha quejado porque a él no lo nombraba, es encantador y me ha comentado alguien que es suya la frase de “cuando la colifata se prende se apaga la televisión”. Dani ya está mejor aunque todavía no va a la radio. Para celebrar el aniversario han traído un citroen dos caballos que utilizaban de unidad móvil, lo van a pintar y cada uno decía lo que le gustaría que pusieran. He estado hablando con Hugo, que me ha preguntado por el documental. He conocido a gente nueva, a Lucas que ha dicho que los “colifatos también sabemos amar y nos gusta que nos amen”. Ha sigo mágico escuchar a Hugo leyendo a Neruda. Beat me ha pedido ayuda para su sección, quería empezar con una canción que le rondaba por la cabeza, que sabía que era española y que no recordaba la letra. Me ha hecho cantar aunque le he hablado de lo desentonada que soy. La canción era Por el camino verde, precisamente esa canción (muchos sabréis cuándo, en qué circunstancias y en qué obra de teatro canté por última vez esa canción) ha sido muy grande. Su texto, precioso, giraba en torno a “quién sabe en qué costado del camino te vas a encontrar la mirada del otro”. He conocido también a Mario, un psiquiatra que va de visita los sábados, un hombre encantador con el que he estado charlando. Me ha encantado la sección “Cosmos” y las reflexiones de todos sobre la pintura del coche. En la sección de Plumita, impresionante mujer, he participado haciendo de Caperucita Roja como una de las alumnas de su divertida clase. Hemos comido tarta y hemos bailado, yo con Javier. Al terminar tenía que ir al subte, Julio, el de “Visitas”, me ha comentado que el barrio es muy peligroso y que me fuera con ellos. Nos hemos ido Julio, Lucas, Triniti, Plumita, Beat y yo. Como decía Triniti, era la continuación de la radio porque hablamos de mil temas. Hemos quedado que el sábado que viene al terminar iremos a comer una pizza. De verdad que me gustaría poder trasladar aquí el ambiente que se respira, paz, libertad, tranquilidad, solidaridad, ternura, comunidad, pero en el sentido más auténtico y genuino de cada uno de estos términos. La semana que viene voy a volver así que dejad aquí todos los mensajes que queráis que les lleguen. En la página de ellos, la que os puse, podéis contactar para la sección de Fefo y hay Skape de ese para que llaméis en directo. El programa es por la tarde, más o menos, de cuatro y media a nueve, hora de aquí. De allí sería de nueve y media de la tarde a dos de la mañana. Os espero porque me han nombrado corresponsal colifata y según Hugo soy la más guapa de España (le he dicho que eso es que conoce a pocas españolas). A petición de la Familia Fontán la próxima vez prometo fotos con todos.

Las fotos prometidas

Hoy he podido poner algunas fotos. De casi todo os he hablado ya así que hay van. Encima de cada una os explico un poco lo que es.

La geperudeta, me hizo ilusión encontrarla aquí, es como ver a alguien conocido muy lejos de casa.

Para que veáis que también trabajo. Aquí estamos Isidro, Alicia y yo a punto de entrar a grabar la entrevista a Carmen, una de las madres de la Plaza de Mayo. A su hija Inés le pusieron una baldosa.

Otra publicidad de ese jugador de básquet tan famosísimo.

Esta pintada me gustó, aunque me impactó la firma. ¿Será nuestro J.P.?

La Catedral, parece un templo griego. Por dentro es muy grande, llena de pequeñas capillas.

El edificio de las madres. Dentro puedes encontrar toda la historia de los largos años de búsqueda, pero además te da mucho más. Cursos, exposiciones, charlas, un centro cultural muy activo.
Este curioso edificio me recordó a la película Mouline Rouge. Era una confitería que se llamaba El Molino.
El Congreso, es inmenso. Y precioso.

El Quijote. No os conté que Sara el otro día quería preguntar a un hombre por una calle y le dijo que era una calle “de cuyo nombre no puedo acordarme”.

Corrientes 348, ni vecinos, ni portero, ni segundo piso, ni ascensor, ni media luz....

La plaza de Mayo, las madres, la gente observando, sacando fotos. Detrás de la pancarta, la casa Rosada, testigo de su lucha, de su callada insistencia durante más de 30 años.

Este es el local de Tango que os conté. Muy auténtico, sin tocar desde la época de los tangos, al menos en apariencia. Se come muy bien, aunque al panqueque de espinacas le ponen nueces y no te lo dicen. Afortunadamente no pasó nada.

Aquí estamos toda la pandilla, de derecha a izquierda Fany, Juan, Isidro, Paula, Yo, Sara y Luca en La Catedral del Tango.